Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Push Gol Caracol
Reciba nuestras notificaciones con lo último de:
No, gracias.
¡Claro que sí!

Publicidad

Que desgracia ser hincha de un equipo colombiano

Lejos está uno de sentir la mediocridad con que juega el jugador criollo, son como las novias; un fin de semana es la más querida, la mujer con que uno quisiera casarse y echar raíces adelante, pero al otro fin de semana no solo basta con verle la cara de "sus días" sino también le toca a uno aguantársele que se vaya de "café" con las amigas, o esa bendita mañana de querer pelear por todo y lo peor es que lo logran. En fin, comparándolas con los jugadores que visten nuestras camisetas ¿quién no ha visto a un jugador colombino en líos?, ¿quién no ha escuchado o ha visto la foto de un tal Tressor Moreno o de un Toloza bajando amarillito?, destilándolo, sudándolo en la camiseta que uno profesa.

En la parranda antes de entrar en concentración Toloza, Tresso Moreno y Jherson Córdoba en ese entonces jugadores del Junior, foto tomada del portal zonacero.info  Ni que decir de los jugadores que se creen las divas y saltan de un equipo a otro, simplemente porque no pudieron comisionar de una forma adecuada, porque el jugador colombiano no solo se destaca en la cancha por borracho, sino por sindicalista pero a la inversa. ¿Qué quiere decir sindicalista a la inversa?, aquel jugador que le pagan un contrato mensual, pero que fechas antes a la clasificación de los cuadrangulares finales, se hace el ´huevon´ y baja su rendimiento para que le hagan una propuesta –comisión- y así ganarse otra platica extra, pero ya fuera lo hiciera sólo, como en la cancha juegan 11, pues le toca regar la bola y ´cometiar´ para todos, ah pero eso sí, a diferentes escalas de porcentajes. Fácilmente por eso uno nunca va a ver una regularidad en un equipo colombiano, durante un semestre te ilusiona, te hace creer y si le va bien solo llega hasta los cuadrangulares, suerte para ese puñado de hinchas que el equipo sale campeón, pero ahí queda la ilusión, el hincha colombiano ya sabe que el próximo semestre va hacer un ´paridero´ igual o peor que las ediciones pasadas. Debemos ser conscientes el hincha colombiano es el más iluso de todos, paga la boleta o el abono creyendo que el equipo de sus amores le es fiel y que te va a llevar por un semestre de alegrías y tú mismo te lo dices, ¨este semestre sí es¨. Pero solo con ver los refuerzos o el técnico que han escogido, ya uno se empieza a preguntar, ¿será que si? Las dudas brotan a flor de piel cuando te ves como hincha dentro del estadio putiando al flaco que no le sale ni media, que trata de parar el balón y se le va larga, o al pelado que tiene la oportunidad de generar una clara opción de gol y la manda a la décima fila de la tribuna. Ahí en ese instante odias la desgracia de ser un hincha al cual no le sale nada, porque solo ves un objetivo, ver a tu equipo dar la vuelta, abrazar a tu papá o abuelo diciéndole ¨Gracias viejo por traerme al estadio, gracias por hacerme hincha¨ del azul, el rojo o el verde. Dicen que la vida se disfruta momento a momento, y si el equipo que amas hace parte de tu vida, dime ¿cómo haces para levantarte al día siguiente después de una eliminación? Dime ¿cómo haces para no odiar aquel central le ganaron por arriba y te clavaron uno o dos tantos? Finalmente dime ¿cómo haces para no sentirte defraudado? Por: @Macquiato

  • Publicidad