Muchas contrataciones, pocos refuerzos

Inicia una nueva edición de la Liga Águila y si uno revisa el movimiento de fichajes se da cuenta de que los 20 equipos realizaron contrataciones, pero a muy pocos se les puede poner el rótulo de refuerzos.

Solamente Junior rompió el mercado con las llegadas de Teófilo Gutiérrez –por fin- y Yimmi Chará, dos futbolistas con un gran potencial ofensivo que prometen muchos goles para la afición barranquillera. Sin embargo, la defensa sigue siendo un punto débil. Se fue Alexis Pérez, su mejor hombre en esa parte de la cancha y no llegó nadie de peso para reemplazarlo.

Nacional, el campeón defensor, que sufrió una baja muy sensible con la salida del entrenador Reinaldo Rueda, ha apostado por mantener la base, ahora de la mano del español Juan Manuel Lillo. El hecho de no tener competencia internacional para este semestre ha llevado a los dirigentes a ahorrar.

Millonarios realizó una presentación de ‘refuerzos’ más romántica que contundente. De los siete jugadores nuevos que mostraron la camiseta azul con su nombre en la espalda -cuatro son juveniles ascendidos al equipo profesional-, sólo dos tienen recorrido: Robinson Aponzá y el defensa central uruguayo, Matías De Los Santos. Queda la duda de si el plantel que se conformó está a la altura para pelear el título.

En América, la meta principal sigue siendo salvarse del descenso. Para cumplir este objetivo, las directivas del club apelaron a la experiencia y a algunos extranjeros que llegan sin mucha continuidad como Fernando ‘Queso’ Fernández y Darío Bottinelli.

El Cali perdió a su arquero titular, Camilo Vargas, mantuvo a los jóvenes que se destacaron en la campaña del subtítulo y seguramente seguirá mirando hacia las inferiores, que por lo general terminan siendo mejores refuerzos que las caras que llegan de afuera.

Independiente Santa Fe cambió de entrenador, mantuvo a su mejor defensa, William Tesillo, repatrió a tres jugadores –Wilson Morelo, Yamilson Rivera y Juan David Valencia- y priorizó la disciplina por encima del talento disruptivo.

El Medellín adquirió al desequilibrante, pero impredecible Édinson Toloza, pero ya no tiene al crack Juan Fernando Quintero. El zaguero que llegó es argentino y se llama Santiago Echeverría. Nadie en Colombia tiene referencias de él.

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Evidentemente, son muy pocas las novedades para destacar dentro del campo de juego. Por eso, el atractivo serán los señores de corbata. Participación en Mundiales, muchos títulos y demasiados años de bagaje habrá en los banquillos de los estadios del país. Ojalá también abunde la paciencia en los dirigentes para aguantar los proyectos si los resultados no llegan en las primeras jornadas.