Luego del pitazo final del encuentro entre Deportivo Cali y Once Caldas, que terminó 2-1 a favor de los locales, un grupo de niños ingresó al terreno de juego para saludar y felicitar a los jugadores, por lo que se esperaba que la Dimayor tomara medidas al respecto.
Sobre este hecho, el técnico Fernando Castro aseguró que "sería muy injusto si la Dimayor sanciona al Cali por los actos del domingo. Yo prefiero a un niño en el estadio gritando, alentando a su equipo, que en una esquina fumando".
En el Artículo 8° del boletín, el Comité Disciplinario consideró que "en efecto hubo una invasión al terreno de juego, pero que los mismos no representaron gravedad o peligro que obliguen a concluir la necesidad manifiesta de imponer una sanción por la conducta impropia de los espectadores".
Además, la Dimayor le hizo un llamado de atención a la escuadra ‘verdiblanca': "se hace necesario advertir que el club organizador del evento debe adoptar todas las medidas de seguridad necesarias para evitar que conductas como la invasión al terreno de juego vuelvan a ocurrir en el Estadio Deportivo Cali, y así evitar la imposición de las sanciones que en derecho correspondan".
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