En la lucha iniciada para frenar la violencia en el fútbol español, la LFP, que confirmó la expulsión de los seguidores madridistas, va a denunciar cada jueves a la Comisión Antiviolencia cánticos ofensivos de los estadios que se recojan en los informes de los trabajadores presentes en los campos o como resultado del seguimiento televisivo.
Los primeros incidentes recogidos ocurrieron en el Santiago Bernabéu, donde desde la Grada de Animación se escucharon cánticos como "Messi subnormal" y "puta Catalunya", y el estadio de Vallecas donde en la mañana del domingo en el duelo entre Rayo Vallecano y Sevilla, se produjeron gritos contra el Atlético de Madrid, desde el sector sevillista, y para Javier Tebas, presidente de la LFP.
Esta semana el Consejo Superior de Deportes (CSD), la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y la LFP acordaron imponer sanciones económicas contra la violencia verbal y estrechar el cerco a los ultras, exigiendo a los clubes nombres y apellidos para presentar a la policía en cuanto ocurra cualquier incidente.
Según confirmaron fuentes de la LFP, la denuncia se presenta a la Comisión Antiviolencia al no ser recogidos los insultos en el acta del partido de los colegiados.
En el inicio de la campaña contra la violencia ya se ha pedido a los árbitros que si escuchan algún cántico ofensivo lo reflejen y es cuando el Comité de Competición podría dictaminar la sanción contra el club infractor.
El Real Madrid tras conocer el resultado del informe, ha actuado con rapidez y ya ha comunicado a la LFP que ha identificado y expulsado a 17 seguidores por los cánticos.
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