La Premier League destinará 1 millón de libras (1,2 millones de euros) a los afectados por los terremotos en Turquía y Siria, que han dejado miles de muertos.
La competición inglesa anunció este viernes que destinará dicha cantidad al Comité de Emergencia de Desastres (DEC, por sus siglas en inglés), que se encargará de dar ayuda humanitaria a aquellas personas que lo necesiten.
Además, como forma de mostrar respeto a las víctimas y a los afectados, los jugadores de la Premier League así como los árbitros llevarán brazaletes negros durante la jornada de este fin de semana, siendo el número de fallecidos y desaparecidos cada vez más, dentro de los que resaltan una gran cantidad de jugadores y deportistas profesionales.
Uno de ellos es Christian Atsu, quien todavía sigue sin dar rastro alguno sobre su paradero después de la fatídica jornada. Cabe resaltar que el africano vistió los colores del Newcastle United de Inglaterra desde el 2016 hasta el 2021.
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El guardameta Ahmet Eyüp Türkaslan también ha sido cruel víctima del sismo, siendo una de las miles de muertes confirmadas en este terremoto que ha solidarizado a las diferentes organizaciones del fútbol mundial, tales como la UEFA, Serie A y demás.
Sin embargo, los futbolistas no han sido los únicos que ha sufrido las graves consecuencias de la naturaleza, pues los deportistas de Turquía también están de luto por lo sucedido el pasado lunes, que ha dejado a muchos de los suyos sepultados debajo de los escombros.
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"Ahora no es tiempo para el fútbol", dijo el presidente del equipo de fútbol Yeni Malatyaspor, Ahmet Yaman, subrayando que están pensando en retirarse de la segunda división de la liga turca.
Según Yaman, no se puede jugar al fútbol tras el desastre del terremoto, cuando "miles de los nuestros están en ruinas, sus familias están de luto, esperando noticias, enterrando sus cuerpos".
Todas las competiciones y eventos deportivos han sido suspendidos en Turquía hasta nuevo aviso.
Según la Federación Turca de Lucha, los atletas Ahmet Tas, Mehmet Eskisarili, Ali Gursoy y Aslan Ekiz murieron en Kahramanmaraş, el epicentro de los seísmos.
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Los equipos de segunda división de fútbol Marasspor e Iskenderunspor también informaron de varios jugadores bajo los edificios derrumbados.
Treinta y ocho escolares turcochipriotas, jugadores y jugadoras de voleibol, y sus profesores se encuentran bajo los escombros de un hotel derrumbado en Adiyaman (al sur de Malatya), a dónde habían acudido para participar en competiciones deportivas.
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También se informó de que los jugadores del equipo masculino de voleibol del Malatya, de la segunda liga de voleibol, se encuentran bajo un derrumbado hotel en esa ciudad.
Por otra parte, 14 jugadoras del equipo femenino de voleibol de Hatay están bajo las ruinas de un edificio derrumbado.
Según la federación turca de balonmano, el internacional turco Cemal Kutahya y el entrenador del Hatayspor Savas Yuksel se encuentran bajo un edificio derrumbado en esa ciudad, una de las más afectadas por el seísmo.
Mientras, el estadio del Fenerbahce de Estambul, uno de los grandes clubes de Turquía, se ha convertido en un centro de recogida de material de ayuda para enviarlo a las zonas arrasadas por el seísmo.
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El exinternacional del Galatasaray Kerem Akturkoglu, que quedó atrapado bajo un edificio derrumbado en el gran terremoto de Estambul en 1999, fue visto mientras distribuía ayuda en la provincia de Hatay.
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