La firgura del partido, entre Mallorca y el Fútbol Club Barcelona, fue Marc-André ter Stegen. ¿Por qué? El guardameta fue el máximo responsable para que el rival no anotara y los 'blaugranas' se llevaran la victoria 0-1, en el estadio de Son Moix.
Basta con recordar una de las atajadas, tal vez la más importante, crucial, determinante y que dejó 'boquiabiertos' a miles de personas, tanto presentes, como quienes vieron la acción a través de sus televisores. Y es que fue una completa locura.
Se jugaba el minuto 92, cuando Jaume Costa sorprendió por la banda izquierda, entró al área y, completamente solo, tomó el balón de primera, rematando a quema ropa, pero se encontró con el muro del arquero alemán, que evitó la anotación.
Los jugadores del Mallorca se tomaron la cabeza, mientras que los hombres del cuadro 'culé' corrieron a abrazar al gran héroe, Marc-André ter Stegen, quien también lo celebró a rabiar, siendo consciente de que no era para menos.
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