En la última jugada de los primeros 45 minutos del encuentro, el ‘pistolero’ se dirigía camino al arco de David Ospina, pero el defensor central colombiano salió a quitarle la pelota, pero no midió su fuerza.
Aunque Mina logró su cometido, ‘robaron’ el balón, también le dejó un recuerdo a Suárez, quien terminó en el suelo con sangre en una de sus rodillas.